Gracias a la información que vemos en redes sociales hemos creado ciertas afinidades con una que otra práctica relacionada al mundo de la salud y el fitness, sin embargo; muchas son poco efectivas e incluso peligrosas para nuestra salud y hoy quiero ayudarte a desmentirlas para que entiendas que ellas no siempre son sinónimo de salud y mucho menos una camino hacia ella.
La primera de ellas engloba la práctica de déficit calóricos por largos periodos de tiempo y es que si bien en necesario ingerir menos calorías que las que necesita nuestro cuerpo para poder perder grasa corporal los déficit calóricos son muchas veces mal gestionados y a largo plazo pueden incluso afectar nuestro metabolismo haciendo más difícil para nuestro cuerpo perder peso.
Los déficit calóricos de más de 500 kcal mantenidos por meses o incluso años harán que tú cuerpo entre en alerta y se aferre a tu grasa corporal para garantizar la energía que necesita, además de dejar de priorizar ciertas funciones de nuestro cuerpo como la menstruación o las funciones inmunológicas y hormonales. Estos déficit extremos muchas veces restan nutrientes a nuestra dieta ya que no son capaces de ofrecerte la cantidad apropiada de alimentos y nutrientes en cada comida sin pasarte un poco de las calorías previstas y es por ello que los déficit calóricos extremos y prolongados no te harán más sano.
Para perder peso y grasa de forma segura lo mejor siempre será un déficit no mayor a 250 kcal por debajo de lo que tú cuerpo necesita para mantenerse en su peso actual, desarrollado a través de una alimentación variada que no excluyas alimentos y que te permita bajar de peso progresiva y no agresivamente. Debes recordar que depende de la cantidad de peso que quieras perder tardarás más o menos tiempo pero puedes hacer intervalos cada mes aumentando un poco las calorías y sobre todo chequearlo con un profesional ya que las calorías que tú cuerpo necesita pueden variar con el tiempo.
Luego tenemos el hecho de basarte en las calorías para elegir tus alimentos y estructurar tu dieta pues la calidad nutricional de la comida no se mide con su aporte calórico sino por su contenido en nutrientes y efecto en nuestro organismo, entiendo que si quieres perder o ganar peso las calorías deben ser tomadas en cuenta pero no es lo único que importa y más allá de clasificar a los alimentos como bueno o malos por las calorías que contienen se trata de crear un balance armónico y adecuado a tus necesidades en el resalte el consumo de alimentos naturales de todos los grupos y dónde entiendas que para estar sano vale más el tipo de alimento que consumes que la cantidad de calorías que aporta.
Mi recomendación si estás empezando es incluir muchos más alimentos naturales en buen estado y que tus platos este llenos de colores, enfócate en controlar el tipo de preparación cocinando y condimentando tu mismo tus comidas, reducir más no eliminar los alimentos procesados para evitar un efecto rebote o daños a la salud y si quieres comer fuera o comer algo mucho más refinado házlo sin sentir culpa pues lo que realmente definirá tu progreso es lo que haces regularmente no lo que comes un par de veces a la semana.
El tercer lugar se lo lleva el consumo de pastillas y suplementación pues actualmente es difícil encontrar a alguien que no te recomiende algún suplemento milagroso o pastillas para perder peso en pocos días pero a pesar de ello estos son completamente innecesarios en tu vida a menos que tengas una condición médica en la que tú cuerpo no absorba o sintetice de forma apropiada algo.
Las pastillas para perder peso o suplementos son muchas veces un gasto innecesario de dinero y tiempo ya que aportan lo que muchas veces podemos obtener de buenos alimentos naturales y actividad física así que por muy tentador que suene o muy popular que sean son solo en casos específicos que puedes realmente sacarle el provecho a un suplemento y claro está, debes siempre consultar con tu médico sobre todo si tienes alguna condición médica preexistente.
Para terminar quiero hablarte de los sobre entrenamientos y ejercicios peligrosos en la rutina y con esto me refiero a sesiones de entrenamientos intensos por horas y la incorporación de ejercicios que generen inestabilidad o que aporten altas cargas comprensivas sobre todo si eres principiante.
Hago énfasis en esto porque realmente no es necesario entrenar por horas para estar saludable, por el contrario; el exceso de estrés que le genera a tu cuerpo el entrenamiento excesivo puede resultar en un desbalance de hormonas como la adrenalina y noradrebalina, hormonas que han demostrado ser inmunosupresoras por lo que al elevarse mucho afectan el funcionamiento correcto de nuestro sistema inmunológico haciéndonos más propensos a enfermamos.
Ademá, son muchas las rutinas que incorporan altas cargas comprensivas en la zona cervical lumbar y abdominal, es decir sobre la base de nuestra estabilidad al entrenar y un entrenamiento inapropiado puede traer como consecuencia serías lesiones pero entonces, ¿cómo identifico estos ejercicios?
Primero debes tener en cuenta que estás cargas pueden resultar de una mala ejecución como por ejemplo empujar con las manos la cabeza al hacer abdominales o arquear la espalda, generalmente estos incluyen ejercicio con incorporación del tronco como los abdominales en banco o ejercicios que afecten los flexores de cadera como los in-out o los que incluyen elevación de piernas.
Nada esto te hará más saludable así que tenlo en cuenta si quieres empezar o ya empezaste un estilo de vida más saludable, te espero la semana que viene con un nuevo artículo en La hora para mí.
